El enfrentar situaciones en las cuales nos sentimos inseguros o inquietos, nos puede producir incertidumbre. Como seres humanos algo que nos es necesario sentir es seguridad, es tener un sentido de control y conocimiento ante lo que nos sucede y el futuro que se nos presenta.

¿Qué sucede cuando estamos carentes de esta seguridad y nos sentimos perdidos, sin un norte?

Esto nos puede producir una sensación de ansiedad, inquietud, frustración, miedo e impotencia. En vez de ayudarnos, estas emociones nos hacen sentir peor ante la incertidumbre ya que nos puede invadir la duda y nos puede hacer tomar las decisiones equivocadas.

Existen diferentes situaciones en la cuales podemos experimentar incertidumbre, entre ellas encontramos lo que nos ha tocado vivir con Covid-19. Hemos experimentado una gran incertidumbre relacionada a nuestra salud, trabajo, situación financiera, estilos de vida, uso de la vacuna, y un futuro promisorio. Todos estos elementos han hecho que muchos de nosotros vivamos en constante desasosiego y miedo. Aparte de la realidad que nos ha tocado vivir con la pandemia, enfrentamos una serie de situaciones a nivel personal sobre las cuales podemos sentir que no tenemos la respuesta sobre cómo proceder.  Deseo recordarte que hay una diferencia entre precaución y miedo.

Si permitimos que el miedo se apodere de nosotros, nos podemos quedar paralizados, incapaces de tomar decisiones y actuar. En momentos de incertidumbre lo mejor que podemos hacer es tener un plan de acción y estrategias para implementar.

Te comparto estas estrategias que pueden ayudarte a lidiar con tiempos inciertos:

Primeramente, reconoce que es imposible tener total control sobre todo lo que nos sucede y esto requiere adaptación de parte nuestra. Escribe algunas situaciones en el pasado en las cuales no tuviste control. Nota cuales de tus fortalezas te ayudaron a adaptarte y sobrellevarlas. Es sumamente importante revalorizar nuestros recursos internos para utilizarlos en tiempos de duda e incertidumbre.

Las situaciones sobre las que no tenemos control generalmente nos pueden hacer sentir incapaces de enfrentar la vida y nos dejamos manejar por factores externos. Debido al ritmo de vida tan de prisa que llevamos, a veces nos mantenemos como autómatas simplemente reaccionando sin darnos cuenta de que le damos el control de nuestras emociones a factores externos y a otras personas. En estos momentos es cuando deseamos reevaluar nuestra forma de actuar y ver si nuestro propio manejo de la situación contribuye a esa sensación de incertidumbre.

Enfócate en el hoy e integra métodos tales como meditación y respiración profunda para manejar cualquier inquietud ante la incertidumbre. Ten presente que el hacer ejercicios también nos ayuda grandemente para soltar esas emociones que nos hacen sentir  más inquietos e inseguros.

Finalmente, nos ayuda grandemente el estar conscientes de las cosas sobre las cuales si tenemos certeza y control. Enfócate en ellas y tomas las decisiones concernientes con seguridad y fuerza interior.

Recuerda, tu vida tiene significado.

Ligia M. Houben