Si hubiera podido escoger el mes en que ibas a fallecer, hubiera escogido enero, pues así tendría todo el año para llegar a las Navidades. Pero no, pues entonces no ibas a estar en Feb 14, el Dia del Amor y la Amistad. ¿Y si hubiera sido a finales de febrero? Tampoco, pues dependiendo del año, La Semana Santa es en marzo o abril, y esa era una época muy sagrada para nosotras.

Pero de igual manera mayo tampoco hubiera sido un buen mes, pues celebramos el día de las madres…¡tu gran día! Así llegamos a junio…que fue cuando falleciste.  Sin embargo, no lo hubiera escogido pues el mes siguiente es mi cumpleaños y fue extremadamente doloroso estar sin vos ese día.

En agosto tampoco podría haber sido, puesto que tu cumpleaños era el 8, y ¡cómo no te íbamos a celebrar otro año de vida!

Pero espera, en septiembre tampoco, pues es mi aniversario y a vos te encantaba felicitarme; en octubre menos, pues es el cumpleaños de Marielena, tu segunda hija. ¿Acaso noviembre? De ninguna manera, pues es el aniversario de mi papá, la cual es una fecha muy sagrada en la familia y empiezan las festividades con El Dia de Acción de Gracias; y diciembre es el cumpleaños de Alicia, tu hija mayor, La Purísima y la Navidad, aparte de esperar el año nuevo con ilusión.

Si hubiera tenido que escoger un mes para tu fallecimiento, hubiera escogido un nombre que no existe en el calendario.

Con amor,

Ligia del Carmen