Al trabajar con muchas personas pasando por pérdidas o transiciones de la vida, he sido capaz de ver el efecto que nuestra actitud tiene sobre cómo manejar la situación.

Algunas personas se enfrentan a un pequeño problema y se encuentran sin esperanza, miedo, o sin motivación. Otras personas enfrentan enormes pérdidas y son capaces de soportar su dolor e incluso convertirse en mejores personas.

¿Cuál es la diferencia entre estos dos grupos de personas?

Tengo que decir que es su actitud.

Aunque algunas personas se enfocan en lo negativo y el dolor, otros utilizan su fe, esperanza y fuerza para seguir adelante.

En lugar de centrarse en la oscuridad que los rodea, optan por utilizar sus recursos internos y encender la luz.

¿A qué grupo de personas perteneces?

Te deseo un lindo día,

Ligia M. Houben